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Estrella tragada - Capítulo 73

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73: Capítulo 73 – Un robo 73: Capítulo 73 – Un robo Editor: Nyoi-Bo Studio En la tierra arruinada y estéril de la Ciudad de Sueño de Wan-Ke, un sonido retumbaba.

Una serpiente tan gruesa como la cintura de una persona atacaba como un rayo contra los dos hombres de la India con cimitarras.

Los dos saltaron a cinco o seis metros de altura y se agarraron de la barandilla de la ventana de un edificio de apartamentos.

La cola de la serpiente se estrelló cruelmente contra un árbol que estaba a un lado.

El árbol se rompió y retumbó al caer.

—¿Tratando de matarme?

—rió Luo Feng.

En este momento, él estaba corriendo rápidamente con un escudo en una mano.

Las dos cabezas de la serpiente de rayas negras perseguían locamente a Luo Feng.

Agitó el brazo y dos cuchillos arrojadizos salieron.

Parecía que Luo Feng usaba su brazo para lanzarlos, pero, en realidad, los cuchillos arrojadizos estaban completamente controlados por la fuerza espiritual cuando eran lanzados, lo que hizo que los dos cuchillos arrojadizos tomaran una velocidad asombrosa.

Un ojo apenas podría ver dos luces frías y borrosas dirigidas hacia la serpiente de rayas negras de dos cabezas.

La serpiente rugió mientras intentaba esquivar.

—¡Cambia!

—gritó Luo Feng con la mirada fría.

Los dos cuchillos arrojadizos cambiaron ligeramente de dirección, pero no en una gran cantidad.

Dado que los cuchillos arrojadizos eran mucho más rápidos que las balas disparadas desde un rifle de francotirador, los otros ni siquiera podían notar que los cuchillos arrojadizos cambiaban de dirección.

Uno de los dos cuchillos arrojadizos rozó la cabeza izquierda de la serpiente mientras volaba, mientras que otro cuchillo logró golpearla.

Desde que comenzaron a pelear, Luo Feng ya había soltado seis cuchillos arrojadizos, todos los cuales ellos estaban atacando la cabeza izquierda de la serpiente.

En ese momento, la cabeza izquierda de la serpiente estaba cubierta de sangre fresca y sus heridas eran impactantes.

El cuerpo de Luo Feng era extremadamente ligero, y su velocidad de aceleración era sorprendente.

El líder del grupo indio, que manipulada un bastón Bo, lanzó un grito de emoción y persiguió a la serpiente, como si fuera un perro que corría, mientras que ésta perseguía a Luo Feng.

Golpe tras golpe, agitó ferozmente su bastón contra la cabeza derecha de la serpiente de rayas negras de dos cabezas, la cual no se atrevía a usar sus cabezas para bloquear el bastón, por lo que solo podía esquivarlo.

Hay que saber que, a pesar de que ese bastón no parecía poderoso y tampoco era afilado como una lanza, una vez que hacía contacto, toda su potencia se centraba en la punta.

El área de la punta no era grande, por lo que esa pequeña punta era un arma contundente.

—¡Vamos, sigue así!

—aulló Gao Feng.

Los otros hombres de la India que empuñaban grandes cimitarras y escudos, junto a Gao Feng, atacaron de cerca el cuerpo de la serpiente de rayas negras de dos cabezas.

En primer lugar, hacer eso impedía que la serpiente usara su cola para atacar a Luo Feng y al líder indio.

Y segundo, querían atacar a esa serpiente gigante a unas siete pulgadas.

El punto débil de la serpiente era de siete pulgadas.

Por supuesto, siete pulgadas es un número abstracto; el objetivo principal era atacar sus órganos vitales.1* A pesar de que la serpiente confiaba en su defensa, aún así no quería dejar que Gao Feng y los otros dos apuntaran a sus signos vitales.

Así que la serpiente retrajo su cola y la envolvió, mientras trataba de pensar en una manera de lidiar con Gao Feng y los otros dos.

Luo Feng voló hacia la posición del capitán Gao Feng.

Cuando estuvo cerca de él, Luo Feng susurró: —Capitán, cuando te acerques a la serpiente para atacar, usa tu martillo y golpea directamente contra la cabeza izquierda de esta serpiente.

—Entendido —repuso Gao Feng entendiendo de inmediato lo que Luo Feng quería decir.

Los movimientos de Luo Feng en el campo de batalla eran extraños y erráticos.

Nunca se había acercado a la serpiente; solo confiaba en su increíble velocidad para volar alrededor del campo de batalla.

—¡YA!

—el líder indio de repente gritó y su rostro se enrojeció.

La sangre en su cuerpo estaba bombeando hasta su límite.

Por un momento, su cuerpo parecía el de un legendario arhat budista.

El bastón Bo aumentó rápida y ferozmente de velocidad y, como si estuviera jugándose la vida, atacó directamente contra la serpiente de rayas negras de dos cabezas.

¡La velocidad del bastón Bo llegó a su límite y, en un abrir y cerrar de ojos, docenas de sombras se estrellaron contra la serpiente!

Dos de las sombras se estrellaron directamente en la cabeza derecha de la serpiente.

La cabeza derecha de la gigantesca serpiente no pudo evitar sacudirse, como si fuera a desmayarse.

Con un ruido sordo, la cabeza derecha de la serpiente cayó directamente al suelo.

La cabeza izquierda de la serpiente de rayas negras de dos cabezas dejó escapar un horrible gruñido y su cuerpo grande y suave se movió de repente.

Se disparó y corrió rápidamente en un movimiento ondulado.

—¡Apresúrense!

—rugió rápidamente el líder indio.

Gao Feng, que había permanecido pegado a la serpiente de rayas negras de dos cabezas, gritó: —¡Muere!

Utilizó todo el poder en su cuerpo para golpear ferozmente con el pesado martillo en su mano.

El pesado martillo era como un proyectil de artillería mientras se estrellaba cruelmente contra la cabeza izquierda de la serpiente de rayas negras de dos cabezas.

La cabeza izquierda de la serpiente esquivó de inmediato.

Luo Feng, que no estaba muy lejos, vio esto y concentró toda su fuerza espiritual en el pesado martillo, ¡acelerándolo instantáneamente por un enorme margen!

La serpiente de rayas negras de dos cabezas esquivó al instante.

Pero a pesar de que el martillo pesado no golpeó directamente su cabeza, aun así, alcanzó a golpear el cuello.

Con el poder extremo de Gao Feng y la fuerza espiritual de Luo Feng como apoyo, la fuerza de impacto de este martillo no tenía rival.

La cabeza izquierda de la serpiente de rayas negras de dos cabezas tampoco pudo evitar caer al suelo con un movimiento mareado.

Justo cuando recobró la conciencia, e iba a volver a levantar la cabeza, Luo Feng dejó escapar una sonrisa.

Un cuchillo negro se levantó instantáneamente desde el suelo, pasó a lo largo de la cara de la cabeza izquierda de la serpiente y se disparó directamente a su cabeza.

La cabeza izquierda no volvió a levantarse.

El bastón Bo aleado del líder indio se disparó como un rayo hacia el ojo de la cabeza derecha, lo destruyó y luego perforó la cabeza derecha de la serpiente de rayas negras de dos cabezas.

La bestia ya había perdido la vida, pero su cuerpo gigantesco aún se retorcía inconscientemente.

Los movimientos se ralentizaron y la serpiente nunca más se movió.

El líder indio no pudo evitar reírse a carcajadas.

—Hermoso —dijo feliz Gao cuando fue a recoger su martillo.

Luo Feng también estaba sonriendo mientras iba a recoger sus cuchillos arrojadizos.

De principio a fin, los hombres de la India probablemente nunca se dieron cuenta de que sus armas estaban siendo controladas por la fuerza espiritual, especialmente en el último golpe.

Solo recién cuando la cabeza de la serpiente de rayas negras de dos cabezas cayó al piso, el cuchillo lanzador de Luo Feng salió del suelo para perforar su cabeza.

—Amigo —el calvo sonrió a Luo Feng y Gao Feng e hizo un saludo—: ¡Good!1 —Tú tampoco eres tan malo —se rió Luo Feng mientras decía.

Podía decir que el indio se jugó la vida en su último ataque.

Incluso ahora, su cara estaba completamente enrojecida y sus venas todavía estaban latientes.

—Ustedes reciben mitad, ¡nosotros recibimos mitad!

—habló el calvo.

Luo Feng señaló la cabeza izquierda de la serpiente y sonrió levemente: —Las escamas serán mitad y mitad también.

Ambos lados sintieron la fuerza del otro.

Ya sea el escuadrón de Luo Feng o el escuadrón indio, ambos probablemente tenían armas de fuego que apuntaban desde un área oculta.

Eso, y ambas partes eran poderosas.

Así que ambos estaban de buen humor.

Luo Feng y Gao Feng comenzaron a diseccionar la cabeza izquierda de la serpiente de rayas negras de dos cabezas y los hombres de la India le diseccionaron la cabeza derecha.

—Luo Feng, esa espada fue cruel —susurró Gao Feng.

Luo Feng se rió mientras sacaba el cuchillo negro de la cabeza de la serpiente después de diseccionarlo.

Fue precisamente ese golpe el que mató a la cabeza izquierda.

De repente… Luo Feng y Gao Feng se dieron vuelta rápidamente para mirar, y las caras de los tres miembros del escuadrón indio también cambiaron a medida que miraban.

Nueve luchadores humanos comenzaron a caminar hacia ellos; la mayoría de ellos eran amarillos.

Cuando esas nueve personas se acercaron y vieron la gigantesca serpiente frente a ellas, determinaron instantáneamente el precio de la misma: unos miles de millones de dólares.

Con una cantidad tan enorme de riqueza, bastantes personas mostrarían su codicia interna.

—¡Por favor, irse!

—dijo el líder de los hombres de la India con su chino rudimentario.

—¿Quién hubiera pensado que nos encontraríamos con el escuadrón Colmillo de Tigre también aquí?

Vaya que están pegados a nosotros…—dijo Gao Feng y su mirada recorrió el grupo frente a él.

Luo Feng miró en silencio.

De las nueve personas que se encontraban frente a ellos, aparte de los seis miembros del escuadrón Colmillo de Tigre, había un veterano viejo, un bruto grande caucásico, y un joven mestizo.

—Gao Feng, realmente se unieron a los hombres de la India…

Pero que ustedes hayan matado a esta serpiente de rayas negras de dos cabezas, qué extraño —dijo el capitán del escuadrón Colmillos de Tigre riendo con frialdad—.

Si ustedes fueran listos, se darían prisa y se largarían.

Si es así, nuestro escuadrón Colmillos de Tigre podría perdonarles la vida, o bien…

no nos culpen.

Oh, Liu es el capitán de nuestro escuadrón Colmillos de Tigre.

Y el Señor Ka Long que está aquí es nuestro vice capitán.

Liu era ese viejo veterano, y Ka Long era ese bruto caucásico.

La mirada de Luo Feng era fría.

—Esta es mi primera vez aquí en la ciudad #003, esta presa es mía.

Ustedes pueden irse —dijo el joven mestizo mientras sonreía.

El veterano viejo y el bruto caucásico estaban de pie a ambos lados del joven mestizo mientras escaneaban el grupo de Luo Feng.

—Quien se atreva a robar mi presa…

¡muere!

—dijo el líder del grupo indio.

Los dos hombres de la India que manipulaban cimitarras junto a él también mostraban su intención de matar.

¿Crees que matar a esta serpiente de rayas negras de dos cabezas había sido fácil?

En primer lugar, ese valioso monstruo mutado era una rareza, y la batalla también había sido amarga.

Gao Feng también sostuvo sus martillos gemelos con una mirada temible.

—Si quieren robarlo, entonces vengan —Luo Feng pisó la cabeza de la serpiente y soltó una risa fría mientras miraba al grupo frente a él—.

Si podemos matar a esta serpiente de rayas negras de dos cabezas, su grupo…

Oh sí, y el rifle de francotirador de nuestro hermano está dirigido directamente a su grupo.

—¡Nuestro rifle de francotirador también está dirigido a ti!

—dijo fríamente uno de los hombres del grupo indio que blandía la cimitarra.

—¿Francotirador?

Varios de los nueve no pudieron evitar levantar sus cabezas hacia los apartamentos residenciales circundantes, pero ni siquiera se pudo ver una sombra en esos edificios en ruinas.

Pero como no podían verlos, se asustaron aún más.

El escuadrón Colmillos de Tigre lo tenía claro: el escuadrón Martillo de Fuego tenía a Chen Gu como su francotirador.

¿Y el grupo indio acaso no traería también sus propios francotiradores profesionales?

En la cultura china, hay un dicho que dice que, si quieres atacar a una serpiente, debes atacar a siete pulgadas.Dijo “bien” en inglés.

Fuente: Webnovel.com, actualizado en Leernovelas.com

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