Herencia de Dos Billones - Capítulo 704

Capítulo 704: Capítulo 104: Bai Xiaosheng, ¿Te Atreves a Intentarlo?!

El anunciador terminó de presentar el acto y realizó un gesto de bienvenida hacia la banda del País UE.

Sentado junto al piano, el Maestro Yegor asintió, colocó sus manos sobre el teclado y tomó un leve respiro.

Toda la audiencia contuvo la respiración y se concentró en la banda.

En el momento en que sonó la primera nota, toda la sala quedó en silencio.

«Adelina junto al Agua», una melodía tan fluida como el agua —tranquila y vivaz, como un manantial sagrado, limpiaba las almas cansadas de los oyentes. Bajo la interpretación del maestro, tenía una belleza que cortaba la respiración.

La pieza terminó.

Sin que nadie dirigiera, el público estalló en aplausos al unísono.

El Sr. Yegor se levantó, hizo una reverencia a los invitados y luego se sentó nuevamente para continuar su actuación.

Una hermosa pieza tras otra, algunas ligeras y brillantes, otras expansivas.

Los aplausos eran frecuentes.

—En el futuro, cuando busque un esposo, también quiero a alguien que sepa tocar el piano, al menos alguien con certificación de nivel ocho. ¡Se siente tan romántico! —dijo una invitada, llena de anhelo.

Bai Xiaosheng sonrió y asintió.

Otros podrían encontrarlo simplemente agradable de escuchar, pero él percibía mucho más.

Loto Rojo había grabado el trasfondo de cada pieza profundamente en su mente.

Cada pieza era una historia.

Pertenecía al alma del creador; cada nota era un grito del alma.

Después de cada pieza, Zhao Qianze preguntaba discretamente a Bai Xiaosheng por su opinión.

Unas pocas palabras de Bai Xiaosheng hacían que ella asintiera con frecuencia.

Zheng Qinghong, al presenciar la expresión de Bai Xiaosheng y su interacción, no pudo evitar sentir desprecio.

Bai Xiaosheng estaba siendo pretencioso, actuando frente a Zhao Qianze como si supiera mucho.

—¿Realmente entiendes? —Zheng Qinghong simplemente no lo creía.

Chen Changluo y Song Yanran compartían esta opinión.

Observando a Bai Xiaosheng, sus pensamientos reflejaban los de Zheng Qinghong, creyendo que Bai Xiaosheng solo estaba engañando a Zhao Qianze.

Un gerente general de orígenes humildes, no podría haber recibido mucha educación superior.

Tan joven para haberse convertido en gerente general, toda su atención debía haber estado en el trabajo. ¿Dónde habría tenido el tiempo o el dinero para estudiar música, especialmente piano?

«Esperen, lo expondré por lo que es», pensó Chen Changluo con una sonrisa burlona.

Chen Jiutian y Chen Jiuzheng estaban absortos en la música, sin mirar hacia Bai Xiaosheng en absoluto, como si no lo hubieran notado.

De hecho, esto era algo que habían discutido con Mu Beichen previamente—tratar a Bai Xiaosheng como un invitado normal.

Ni despreciarlo ni prestarle atención extra.

Querían que Bai Xiaosheng pasara por el banquete sin problemas, sin sentir hostilidad por parte de la familia Chen.

Al final de la pieza, la sala estalló en aplausos una vez más.

El Maestro Yegor de repente se levantó, tomó el micrófono del anfitrión y dijo algo en ruso.

La sonrisa del anfitrión se tensó. No entendía. Si bien el inglés era manejable, el ruso se consideraba un idioma minoritario en el país.

Justo cuando el anfitrión estaba preocupándose, alguien detrás de él dijo:

—Yo traduciré para el Sr. Yegor.

El anfitrión se sintió inmediatamente aliviado, se dio la vuelta para ver a Chen Changluo y, conociendo su identidad, rápidamente se hizo a un lado.

Chen Changluo, sosteniendo un micrófono que estaba preparado de antemano, tradujo textualmente lo que el Maestro Yegor decía para que todos lo oyeran.

—El Maestro Yegor dice que está muy feliz y honrado de actuar hoy para tantas personas distinguidas y exitosas.

Tras la traducción de Chen Changluo, el público aplaudió al unísono.

Los chinos valoran la etiqueta.

Las palabras del Maestro Yegor complacieron enormemente al público.

—El Maestro Yegor también dice que ha oído hablar del Grupo Zhenbei, un consorcio financiero de renombre mundial. Dice que aquellos de ustedes presentes que ocupan posiciones importantes en el grupo deben tener talento en muchos aspectos. Se pregunta si alguien querría subir y tocar un breve segmento, para compartir la alegría con todos.

Chen Changluo tradujo con una sonrisa.

El Maestro Yegor también sonrió ampliamente, haciendo un gesto de bienvenida.

Hablando de tocar el piano, entre los más de doscientos invitados presentes, había bastantes que podían tocar, y no pocos.

¡Estos invitados representaban varios niveles de la sociedad, todos ellos figuras bien conocidas!

Muchas personas provienen de familias adineradas, donde la música es una materia obligatoria. Aunque la mayoría no ha tomado exámenes de grado, aún pueden tocar una pieza hasta cierto punto.

Sin embargo, tocar una pieza frente a un maestro se siente como mostrar habilidades menores ante un experto—es algo presuntuoso.

Bajo la restricción de la modestia china, todos eran bastante humildes.

—¿No hay nadie dispuesto a dar el primer paso? —Chen Changluo miró alrededor de los invitados y sonrió—. Entonces me avergonzaré para romper el hielo. Si no toco bien, ¡por favor perdónenme!

Ante esta declaración, la multitud vitoreó inmediatamente.

—No esperaba que Chen Changluo mostrara sus habilidades —dijo Bai Xiaosheng, un poco sorprendido.

Zhao Qianze escuchó esto y frunció los labios.

—Es solo un presumido. ¿Qué tiene eso de grandioso? Tú también sabes hacer perfumes, ¿pero vas por ahí presumiendo de ello? ¡Simplemente está buscando una oportunidad para lucirse!

Al escuchar el desdén de Zhao Qianze, Bai Xiaosheng solo sonrió y no dijo nada.

—Bai Xiaosheng, te vi bastante absorto hace un momento, pareces saber mucho sobre esto. ¿Qué tal si lo intentas después? ¡No me digas que sabes escuchar pero no puedes tocar! —Zheng Qinghong habló de repente.

Las personas en la mesa miraron a Bai Xiaosheng con miradas juguetonas, con un toque de burla.

Una y otra vez, había sido Bai Xiaosheng quien había obtenido una puntuación alta, y todos estaban ansiosos por verlo fallar por una vez.

Bai Xiaosheng miró a Zheng Qinghong, sonrió sin decir palabra, y también detuvo a Zhao Qianze de intentar hablar por él.

—¿No puedes hacerlo? —Zheng Qinghong resopló con una sonrisa burlona—. ¡Pronto, planeo tocar una pieza! ¡Dedicada a Qianze!

—¡No es necesario! —Zhao Qianze respondió con rostro frío y severo.

Zheng Qinghong no se ofendió, sino que mostró una sonrisa magnánima en su lugar.

Mientras tanto.

Chen Changluo se sentó al piano, imitando la actitud del maestro, tomó un leve respiro y colocó sus manos en las teclas.

Comenzó a sonar una pieza de piano, era bastante buena, muy agradable de escuchar.

—¿Qué está tocando? —Zhao Qianze no pudo evitar preguntar.

Simplemente tenía curiosidad y preguntó casualmente.

—Sonata en Mi mayor, tercer movimiento, Haydn —respondió Bai Xiaosheng sin pensar—. Es una pieza de Piano de Grado 6.

La pregunta y respuesta inconscientes de los dos dejaron a Zhao Qianze repentinamente sorprendida, y miró a Bai Xiaosheng con asombro—. ¿También sabes esto?

Bai Xiaosheng solo sonrió, sin responder.

—¿Qué tan bien la está tocando? —preguntó Zhao Qianze nuevamente.

—Con bastante habilidad —pensó Bai Xiaosheng un momento antes de responder.

¿Solo con habilidad?

A un lado, la nariz de Zheng Qinghong casi se torció de molestia—. ¡Está tocando extremadamente bien, a la par conmigo!

Cuando la pieza terminó, todos aplaudieron.

—Humildemente presento esto —Chen Changluo se puso de pie y dijo con una risita a todos.

Mientras hablaba modestamente con su boca, Chen Changluo sacaba el pecho con orgullo en respuesta al aplauso simbólico del Maestro Yegor, su rostro radiante.

Luego, el Maestro Yegor le susurró algo y hasta miró en dirección a Bai Xiaosheng.

Chen Changluo asintió, recogió el micrófono y sonrió hacia Bai Xiaosheng, diciendo:

—El Maestro Yegor ha oído que los protagonistas del banquete de hoy son la élite de las élites dentro de nuestro grupo. Le gustaría ver cuán sobresaliente es el individuo más destacado, para ver si también puede tocar una pieza.

Sus palabras dejaron a la multitud atónita, luego muchos comenzaron a hacer alboroto.

—Correcto, veámoslo por nosotros mismos.

—¡Entre la élite del grupo, debería haber dragones ocultos y tigres agazapados!

Chen Changluo sonrió, señalando a Bai Xiaosheng—. Nuestro actual mejor puntuado, el Sr. Bai Xiaosheng… ¿no quieres subir e intentarlo?

Todas las miradas se posaron en Bai Xiaosheng al unísono.

La expresión de Zhao Qianze cambió drásticamente.

¡¿Qué está tratando de hacer Chen Changluo?!

La información sobre los logros de Bai Xiaosheng había sido escuchada por Song Yanran de Zhao Qianze.

—Hace un momento, lo vi escuchando atentamente e incluso explicando a la dama a su lado, así que parece entender bastante bien. Quiero ver si este Bai Xiaosheng realmente sabe de qué está hablando o solo finge profundidad —el tono de Chen Changluo cambió, sutilmente poco amistoso—. ¿Qué dice, Sr. Bai Xiaosheng, se atreve a intentarlo?

Chen Changluo quería arrancar públicamente el disfraz de Bai Xiaosheng, ¡exponiendo su ignorancia e hipocresía ante todos!

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