Anterior
Siguiente
Tamaño de Fuente
Tipo de Fuente
Color de Fondo

116: Capítulo 116: Rivalidad 116: Capítulo 116: Rivalidad Editor: Nyoi-Bo Studio —Pssst —La ensangrentada espada atravesó la cabeza del hombre y un indicio de miedo pasó por sus ojos, pero su expresión se volvió vacía.

Rhode se levantó y agitó la espada sangrienta.

Después observó el bosque con una expresión seria.

Lo que el tipo había dicho y lo que él pensaba era casi exactamente lo mismo.

El grupo mercenario Jade Tears no había enviado solo una unidad.

Según ese desafortunado gusano, esta vez habían enviado dos tercios de sus fuerzas.

Fueron divididos en tres unidades para que siguieran y atacaran a Starlight cuando fuera necesario.

Estrictamente hablando, el equipo que Rhode había atacado ni siquiera era considerado una unidad de combate.

Solo eran responsables de reconocimiento.

Según el acuerdo del grupo Jade Tears, algunos eran responsables de explorar, mientras que se suponía que las unidades de combate rodeaban al objetivo.

La última unidad había desaparecido justo después de entrar al Bosque Crepúsculo.

Eran refuerzos, pero el hombre que Rhode había interrogado no conocía su ubicación.

Originalmente, estas dos unidades no debían estar muy lejos de la otra, porque si algo ocurría, sería más fácil que se apoyaran entre sí.

Pero la situación había sido totalmente opuesta.

De acuerdo con el informe, la persona que lideraba la fuerza principal era un recién llegado a Jade Tears, y Bell no estaba dispuesto a seguir las órdenes de alguien así.

Por eso, después de entrar al Bosque Crepúsculo, los dos lados se volvieron hostiles entre sí y Bell se fue con su propia unidad.

Claramente no planeaban reunirse más.

En la opinión de Bell, solo tenía que esperar hasta el momento previo al ataque y enviar gente para informar al grupo principal.

¡Si no fuera por él, era básicamente imposible que todos esos tontos encontraran su blanco aquí afuera!

Aunque Rhode sabía desde el principio que Jade Tears era un grupo basura, el alcance de su penosidad le había sorprendido de verdad.

Incluso empezó a preguntarse si el oponente estaba actuando débil a propósito para engañarlo.

Si no era así, entonces ¿no eran sus movimientos muy suicidas?

Lo que llamó la atención de Rhode no fue la ubicación desconocida de la fuerza principal, sino de los refuerzos.

Nadie vivía en el Bosque Crepúsculo, y lo único que pasaba por allí eran aeronaves.

Naturalmente, no había ladrones ni bandidos porque no tenían alas para volar y robar.

Por eso, desde otro punto de vista, podía decirse que el Bosque Crepúsculo estaba desierto.

Tal vez había algunos aventureros de vez en cuando, pero ninguna persona normal decidía vivir aquí por mucho tiempo.

Y sin embargo, ¿buscar refuerzos en el bosque?

¿Acaso planeaban hablar con las bestias salvajes o algo así?

En cuanto a lo que Rhode entendía de Frank, creía que no era alguien extremadamente idiota.

Lo más probable era que el supuesto refuerzo fuera la fuerza principal de su ataque, y que estos mercenarios solo fueran una pretensión.

Si no, no tendrían que esperar que llegaran los refuerzos para atacar.

Aunque Rhode quería preguntar sobre eso, el hombre solo era un subordinado y no conocía mucho los detalles de la situación actual.

Tal vez el capitán sabría, pero desafortunadamente ya había muerto en los brazos de la mujer.

Hasta ese momento, Rhode no se había percatado de que el hombre que había matado antes sin problema era el líder de la unidad.

Santa bendición del alma, pensó que el tipo era un solitario mercenario cualquiera que buscaba divertirse.

—¿Qué deberíamos hacer ahora, chico?

¿Acabamos con esos tipos?

—¿Solo nosotros dos?

Rhode negó con la cabeza.

Había más de 20 personas en la fuerza principal y, aunque ambos podían retirarse a salvo después de ir, no podían garantizar que el enemigo no se asustara.

Rhode definitivamente no quería despertar un lobo durmiente.

Su política era hacerlo bien o no hacerlo, y no tenía intenciones de hacer nada a medias.

Al final tomó la decisión de retirarse temporalmente.

En cualquier caso, sin exploradores, sería difícil que lo encontraran.

Según aquel desafortunado gusano, los dos grupos ni siquiera intercambiaban información.

Era probable que el oponente no estuviera al tanto del problema.

Siempre que pudieran terminar todo antes de que el enemigo se enterara, la situación sería muy favorable para ellos.

Por supuesto, Rhode dejó atrás a Walker y le dijo que investigara la dirección que les había indicado el prisionero por razones preventivas.

El pobre viejo montaraz había corrido toda la noche siguiendo a Rhode y solo quería volver a dormir solo, pero le habían ordenado que se quedara en el bosque a sufrir.

Esto hizo que el anciano quisiera voltear la mesa por impulso, pero ante esta queja, Rhode ni siquiera respondió y solo se fue.

El montaraz se quedó pasmado por un momento, y al final solo sacudió la cabeza y se fue.

Después de eso, continuó la tarea que le habían asignado.

Cuando Rhode volvió al campamento base, ya casi amanecía.

Al escuchar de Celia que nada había pasado, Rhode la retiró.

Aunque había llegado al nivel 15, su poder del alma era casi igual al de un mago de bajo rango.

Para mantener la existencia de Celia necesitaba usar 30 poderes del alma por hora, lo que era un enorme precio.

Esta también era la razón por la que había decidido retirarse temporalmente.

Después de mantener a Celia por una noche, había gastado casi un tercio de su poder del alma.

En esa condición no podía arriesgarse.

Después de saludar a Shauna, quien estaba a cargo de la guardia nocturna, les informó a los demás mercenarios que iban a comenzar un nuevo entrenamiento.

Después, se fue cansado a su propia tienda y cayó en un profundo sueño al instante.

Cuando se despertó al día siguiente, ya era mediodía.

Fuera de las tiendas, los mercenarios que habían escuchado la orden ya habían terminado sus preparaciones.

Apagaron el fuego, recogieron las trampas y devolvieron todo a la normalidad.

Marlene y los demás se veían un poco aburridos por los momentos.

Al ver a la hermosa chica que disfrutaba de la escena, los otros tampoco se opusieron a que disfrutara esta rara vacación.

—Señor, todo está listo.

Al ver a Rhode saliendo, Shauna se le acercó rápidamente para saludarlo.

En este momento su actitud era más respetuosa que antes.

Antes lo llamaba «líder» solo por obligación, pero después de ver a Celia, ya no pensaba así.

Era natural que lo llamara «señor», ya que incluso podía convertir a un ángel en su subordinado.

Rhode se percató de que los otros recién llegados también mostraban cambios similares.

Su tono y actitud eran más respetuosos, y cuando lo miraban, sus ojos mostraban un indicio de asombro.

Incluso Lapis, que siempre tenía cuidado con él y se escondía detrás de su hermano, había empezado a actuar como una fanática y lo veía con ojos de adoración.

Claro, para Rhode, eso era bueno.

Antes tenía que fingir ser un noble al depender de su conocimiento, forma de hablar y su comportamiento.

Pero ahora parecía haber dado en el clavo con su estatus de noble.

No había nadie que dudara de él.

Después de todo, ¿alguien ordinario tendría un ángel como subordinado?

¡Era básicamente imposible!

Por el contrario, la actitud de Lize era bastante rara.

Había intentado hablarle varias veces, aparentemente teniendo algo que decir.

Aunque Rhode le había preguntado si tenía algún problema, ella solo agitó la cabeza.

Ante esta Lize, él no sabía qué hacer, así que solo la dejó tranquila.

Obviamente, Rhode estaba muy familiarizado con el Bosque Crepúsculo.

Poco después de irse del campamento base, los llevó a un valle.

—Creo que ya todos conocen el entrenamiento anterior.

Ante la pregunta de Rhode, los mercenarios asintieron con la cabeza.

Como el programa de entrenamiento de Rhode no era muy complicado, ellos podían usar esas habilidades desde el comienzo, solo que nunca esperaron que pudieran utilizarse de esa forma.

Ahora habían memorizado esas combinaciones, y solo necesitaba ver qué tan bien las habían dominado.

—Muy bien —asintieron y Rhode no dijo nada más.

Agitó la mano y señaló el valle más adelante—.

Esta es la segunda parte del entrenamiento.

Su contenido es muy simple.

Quiero que todos entren a este valle.

Al final hay un manantial claro y una piedra de hielo que solo puede encontrarse allí.

Quiero que me traigan esas piedras después de entrar al valle.

Claro, no temo decirles que hay bestias salvajes viviendo en el valle.

Atacarán a cualquier enemigo que invada su territorio sin permiso.

Tengan cuidado, el límite son 3 horas.

Espero que puedan volver antes de la cena.

Ahora, ¡vayan!

Aunque los mercenarios se sintieron un poco asustado y abrumados después de que Rhode diera la orden, se tragaron sus sentimientos y entraron al valle.

Pronto, sus sombras desaparecieron en el bosque.

Solo Rhode, Anne, Lize, Marlene y Lapis se quedaron afuera.

Al ver que la figura de su hermano había desaparecido, Lapis se preocupó un poco, pero sabía que con base en su fuerza actual era imposible que se les uniera, así que solo pudo esperar afuera pacientemente.

Lize también observó el valle ansiosamente y, acercándose a Rhode, preguntó: —¿De verdad no habrá problemas, Sr.

Rhode?

Anne estaba sentada en un gran árbol al lado de Rhode y, mordiendo la manzana que tenía en la mano, preguntó:  —¿Anne debería ayudarlos?

—No hace falta —Ante sus preguntas, Rhode sacudió la cabeza.

Como se había atrevido a traer a esos novatos hasta acá, ya lo debía haber pensado.

Esta era una misión grupal para novatos.

Aunque se hacía en grupo, la cantidad de monstruos no era muy grande.

Solo había lobos y perros salves, y cosas así.

Básicamente no era muy peligroso y, al menos, en comparación con los calabozos formales, el nivel de peligro de esta misión grupal era mucho menor.

Si esos novatos no podían arreglárselas con este nivel de peligro, entonces Rhode en serio consideraría si de verdad estaban preparados para unirse a su grupo mercenario—.

No es muy peligroso, así que no debería haber problema.

Se dice que incluso un león empuja a sus cachorros al abismo y les deja salir por su cuenta.

Si ni siquiera pueden pasar una prueba así, entonces es inútil dejar que se queden.

—Líder, eso es con los leones y sus propios cachorros…

Al ver la sonrisa de Anne, la cara de Rhode se quedó sin emoción.

—En mi pueblo natal hay un dicho: «un maestro por un día es un padre para toda la vida».

Ya yo puedo ser considerado su medio maestro —respondió Rhode tranquilamente.

Fuente: Webnovel.com, actualizado en Leernovelas.com

Anterior
Siguiente
  • Inicio
  • Acerca de
  • Contacto
  • Política de privacidad

© 2025 LeerNovelas. Todos los derechos reservados

Iniciar sesión

¿Perdiste tu contraseña?

← Volver aLeer Novelas

Registrarse

Regístrate en este sitio.

Iniciar sesión | ¿Perdiste tu contraseña?

← Volver aLeer Novelas

¿Perdiste tu contraseña?

Por favor, introduce tu nombre de usuario o dirección de correo electrónico. Recibirás un enlace para crear una nueva contraseña por correo electrónico.

← Volver aLeer Novelas

Reportar capítulo