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146: Capítulo 146: Sigue A Tu Corazón 146: Capítulo 146: Sigue A Tu Corazón Editor: Nyoi-Bo Studio Frente a la impulsiva Marlene, Rhode solo pudo suspirar con impotencia.
Desde el principio, él nunca tuvo la intención de firmar un contrato con Marlene.
Aunque la señorita trajoal grupo muchos resultados positivos, contribuciones, e incluso de cierta forma podía considerarla como una vicelíder, Rhode tenía muy en claro que sería imposible que Marlene se quedase.
La razón era simple.
Era Marlene Senia.
Para los nobles, su apellido era más importante que su nombre.
Francamente, la situación se sentía como si la hija de una familia rica trabajase en un restaurante de comida rápida.
Si trabajara solo unos pocos meses, el jefe no tendría ninguna objeción e incluso podría ayudarla a adquirir más experiencia.
Pero si decidiera trabajar allí durante muchos años, ningún jefe podría aceptarlo.
Además, el papel de Marlene en el grupo mercenario era diferente al del resto.
No recibía su parte de las recompensas de las misiones, ni se preocupaba por ello.
Su motivación era adquirir experiencia en la vida real y nada más.
Aunque Marlene se desempeñó bien en términos de comandar y dar confianza al equipo, esas acciones no fueron para traer un beneficio material, sino que solo era su comportamiento diario como noble.
A veces, cuando Rhode estaba demasiado ocupado, Marlene tomaba el mando temporalmente.
Como asistente, era muy competente.
Sin embargo, como mercenaria, simplemente no era tan buena.
Por eso, Rhode nunca consideró hacerle un contrato mercenario a Marlene.
Por supuesto, podría haber elegido hacerle un contrato para atar a la maga genio a su lado.
Sin embargo, Rhode tenía muy claro las consecuencias de hacer eso.
Aunque la ley ampararía el contrato, a la familia Senia no le importaría un bledo.
Si de alguna manera provocaba su ira, Rhode estaría en apuros.
Además, la familia Senia era la columna vertebral del Partido del Rey, así que Rhode no quería arriesgarse a generar potenciales problemas.
—Creo que debes tener muy claro tu estatus, Marlene.
Eres una maga, no una mercenaria.
Mientras decía eso, Rhode le hizo un gesto para que se calmara.
—Además, tu familia no estará de acuerdo con esto.
Estoy bastante seguro de que ya has visto el contenido del contrato.
Como sucesora de la familia Senia, ¿podrías aceptarlo?
La cara de Marlene cambió y se desplomó en una silla como si hubiese perdido la energía.
Sin duda alguna, era muy consciente de que si fuera solo «Marlene», no habría ninguna complicación.
Pero si tuviese que decidir como «Marlene Senia», entonces le sería muy difícil.
Rhode lo supo desde el principio, así que nunca consideró hacerle un contrato.
Al hacer eso, no la obligó a tener que elegir entre el grupo mercenario o su propia familia.
Conociendo a Marlene, Rhode sabía que definitivamente no elegiría la primera opción.
Ella era una persona razonable que había tenido una educación estricta desde muy joven, y tenía muy en claro cuáles eran sus prioridades.
En una situación así, no dejaría que sus emociones tomaran la decisión.
En lugar de generar una situación incómoda para ambos, sería mejor no mencionar el contrato.
Pero Rhode podía entender muy bien por qué Marlene se extrañó al no recibir uno.
Después de todo, había estado en Starlight durante mucho tiempo y, naturalmente, había desarrollado algunos sentimientos allí.
Ahora que Rhode les había dado a todos un contrato y la había dejado fuera, por supuesto que tendría algunas quejas.
Era normal.
Rhode no estaba seguro de cuánto tiempo Marlene podría permanecer dentro del grupo mercenario.
Pero sabía que no sería mucho.
Honestamente, tener a una maga genio a su lado le haría las cosas más fáciles.
En lo posible, esperaba encontrar otros magos para unirse a Starlight a través de Marlene.
El nivel requerido no era demasiado alto, puesto que Rhode creía que los conocidos de Marlene no debían ser demasiado débiles.
Ya que la señorita rica era una persona muy orgullosa, no se mezclaba con gente «ordinaria».
Por lo tanto, las personas que reconociera como capaces no deberían ser tan malas.
Pero Rhode no tenía la intención de preocuparse por esas cosas, ya que aún no era el momento.
Creía que cuando llegase el momento de que Marlene se marchara, ella también pensaría en ese problema, puesto que era una persona muy responsable.
Contrariamente a sus expectativas, la respuesta de Marlene le diouna gran sorpresa a Rhode.
Se sentó en silencio durante mucho tiempo.
Y cuando finalmente levantó la cabeza, dijo algo que lo sorprendió.
—¿Eso significa que si mi familia me permite quedarme, recibiré un contrato como Lize?
—Esto… Rhode se quedó atónito por un momento.
Nunca esperó que Marlene se preocupara tanto por eso.
No parecía ser beneficioso para ella.
—Las cosas no son tan simples como crees, Srta.
Marlene.
Rhode decidió ser directo y decir la verdad de una vez por todas.
—Después de pasar una considerable cantidad de tiempo con nosotros, debes entender la naturaleza de ser un mercenario.
Puedo ver que no tienes interés en ser una mercenaria aparte de las aventuras.
Así que no creo que debas firmar un contrato, ya que no nos beneficiaría a ninguno de los dos.
—Soy… soy consciente de eso —dijo Marlene asintiendo con la cabeza —, pero… aun así espero recibir el mismo trato que Lize.
Además… De repente, Marlene se dio cuenta de que podía haber dicho algo que no debía y rápidamente cerró su boca.
Rhode comenzó a sospechar después de escuchar sus palabras.
Se dio cuenta de que Marlene había estado mencionando a Lize desde el principio de la conversación, como si no fuese justo que le diera un contrato a Lize y a ella no.
Marlene debía tener muy en claro el estatus de Lize en el grupo mercenario, así que, ¿por qué tendría pensamientos tan infantiles?
Algo no estaba bien.
—De todos modos… Bajo la mirada de Rhode, Marlene tosió torpemente y su cara se sonrojó un poco.
—Entiendo lo que quiere decir, Sr.
Rhode.
Pero sin importar cuál sea la razón, yo también contribuí mucho al grupo Starlight, por lo tanto, debería tener el derecho de recibir un trato similar.
En cuanto a mi familia, no debe preocuparse.
Creo que no se verían muy afectados por este asunto.
Pase lo que pase, espero poder convertirme en la más especial aquí.
—Lo consideraré.
Al final, ante la persistencia de Marlene, Rhode asintió con la cabeza.
Después de regresar a su habitación, Marlene se inclinó en la puerta mientras dejó escapar un largo suspiro.
Puso su mano sobre su pecho y sintió que su corazón latía muy rápido.
Al ser una mujer inteligente, era muy consciente de que se estaba comportando un poco extraño, ya que sabía que Rhode tuvo buenas intenciones hacia ella.
Pero por alguna razón desconocida, cuando fue testigo de la expresión de emoción de Lize y Anne cuando discutían los contratos que decidirían su futuro, se sintió un poco molesta.
La sensación de ser marginada la hizo sentir incómoda.
Sin embargo, ser marginada no era algo desconocido para ella.
Más aún cuando era la sucesora de una familia influyente, y una maga genio.
Otras personas cuyo estatus, riqueza y títulos no eran tan buenos como los de ella, la evitaban.
Aquellas personas cuyo talento y habilidad no eran tan buenos como los de ella, la marginaban.
Pero eso no afectó a Marlene.
No se sentía marginada.
En cambio, pensaba que eso demostraba que había tenido éxito.
Sin embargo, cuando se unió al grupo mercenario Starlight, esos pensamientos se desgastaron lentamente.
Se llevaba bien con todos allí.
Lize, Anne y los demás.
Aunque no consideraba a los otros mercenarios como amigos, tenían una mejor relación con ellos que con sus compañeros de clase de las escuelas de élite.
A los mercenarios no les importaba demasiado su familia ni su estatus.
La trataban bien puramente por sus habilidades, lo que hacía que Marlene se sintiera satisfecha.
Pensaba que su decisión de unirse al grupo mercenario Starlight fue la mejor decisión de su vida.
Sin embargo, podía entender las razones de Rhode para no hacerle un contrato, pero aun así, esperaba que la tratara de la misma manera que al resto.
Marlene entendíaque las relaciones humanas se construían en las interacciones comunes.
Ahora que estaba cómoda allí, naturalmente, no quería irse.
Pero Marlene sabía claramente que esoeran excusas.
Y la razón principal era… Marlene agitó la cabeza rápidamente y empujó esos pensamientos molestos a un rincón de su mente.
Luego respiró profundamente y se calmó.
Más tarde, la doncella sacó una insignia de su bolsillo y la puso sobre la mesa.
Luego de cerrar los ojos, recitó un verso suavemente.
La gema en mosaico en la insignia comenzó a brillar, luego, emitió una luz sutil que formó la ilusión de una silueta humana que se asemejaba a un hombre de unos cincuenta años.
Se puso de pie y se peinó el cabello hacia atrás con un peine.
Una negra túnica corta revelaba su alto y enorme cuerpo.
Sostenía un bastón blanco en su mano, mirando firmemente a la doncella que tenía frente a él.
Al mismo tiempo, sonó una voz grave y majestuosa.
—Ha pasado un tiempo, hija mía.
—Sí, hace mucho que no te veía, papá.
Te ves genial como siempre.
Marlene levantó ligeramente el dobladillo de su falda e hizo una reverencia hacia el hombre.
—Tú también, hija mía.
Me alegra verte llena de energía.
El hombre reveló una sonrisa ligeramente cálida.
Aunque la sonrisa no era obvia, Marlene pudo sentir el cuidado y la calidez desde adentro.
—El Sr.
Sereck me ha dicho que te has unido a un grupo mercenario muy interesante.
Así que ahora que me has contactado, ¿hay algún problema?
—Tienes razón, papá.
Marlene se aclaró la garganta tosiendo un poco, y dijo con orgullo: —La razón por la que me puse en contacto contigo fue porque tengo dos asuntos de los que informarte.
—¿Eh?
¿De qué se trata?
—El primer asunto.
En cuanto a mi progreso actual, papá, puedo decir con confianza que he superado la sexta capa del círculo medio y casi he llegado a la quinta.
—¿Qué?
La expresión del hombre reveló sorpresa y alegría.
—¿Tan rápido?
Parece que lo estás haciendo bien, hija mía.
Pero tienes que recordar ser humilde en el camino de la magia.
Aunque has mejorado considerablemente en tan poco tiempo, debes recordar que no debes ser arrogante ni imprudente.
Es importante que construyas unos cimientos sólidos.
—Sí, papá.
Lo recordaré en mi corazón.
Marlene se inclinó ante él.
Ya estaba acostumbrada alos consejosde su padre.
Al principio, pensaba que la regañaba, pero al madurar, comprendió que era solo un acto de amor.
—Entonces, ¿cuál es el segundo asunto?
Hasta ahora me has dado buenas noticias, espero que la próxima no me decepcione.
—No, no es nada de eso, papá.
Creo que estarás muy emocionado con el segundo asunto.
Marlene levantó la cabeza con un poco de rubor en la cara, pero entre sus cejas había emociones fuertes que no podía expresar.
—Puedo decir con confianza que ya he encontrado aaquel que está destinado a serel Rey de mi vida.
¡El caballero que la familia Senia siempre ha estado esperando!
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