Tamaño de Fuente
Tipo de Fuente
Color de Fondo
175: Capítulo 175: Antes De Partir 175: Capítulo 175: Antes De Partir Editor: Nyoi-Bo Studio —¿Dejar a Anne ir?
—Al escuchar que Rhode mencionó su nombre, Anne inclinó la cabeza hacia un lado con curiosidad.
Después depensar por un rato, asintió—.
No hay problema, líder.
Anne le seguiráa donde vaya.
Después de decirlo, Anne volvió a concentrarse en la comida y empezó a comer de nuevo.
Parecía que no le importaba lo que Rhode le dijera que hiciera; lo haría de todas formas.
En cuanto a por qué Rhode la eligió, ¿qué iban a hacer?
No parecía tener nada que ver con ella.
Si tenía tiempo para pensar en una respuesta, era mejor que lo invirtiera comiendo el pan que tenía en frente.
—¿Quiere que vayamos también, Sr.
Rhode?
—dijeron Lize y Marlene después de intercambiar miradas.
—No hace falta —Rhode negó con la cabeza.
De todas formas, las Ruinas de Pinos Negros no eran tan problemáticas y tampoco había criaturas no muertas.
Lize, una clériga, no tenía que ir con él; sería demasiado desperdicio.
Al comienzo, Rhode no quería llevarse a Anne, solo que él no podría traer la Bola Misteriosa por sí mismo.
Aunque por su nombre no parecía demasiado grande, las pelotas de tenis de mesa también eran bolas, así como las de baloncesto y la luna…
Rhode no pensaba que tuviera la fuerza para levantar una luna.
Originalmente, uno necesitaba un personaje de clase bárbaro para tomar la Bola Misteriosa.
Rhodeno tenía ningún subordinado bárbaro, aunque Anne, siendo media bestia, no estaba mal…
al menos era mucho más fuerte que él.
—Espero que puedan cuidar de Christie estos días.
Acaba de llegar, así que debe haber muchas cosas a las que no se ha acostumbrado todavía.
Como ustedes son mujeres, deben entenderla mejor que yo.
—Muy bien —Al oírlo, Lize vaciló un rato y luego accedió.
No le preocupaba mucho el arreglo de Rhode.
De hecho, ella también esperaba poder quedarse al lado de Christie.
Sin embargo, parecía que no estaba acostumbrada a su entorno actual, así que mantenía ciertas distancia de ellas.
Christie solo se sentía aliviada cuando Rhode estaba con ella, pero con estas palabras, Lize finalmente podía acercarse a ella justificadamente.
—¿Cuándo van a partir?
—Marlene miró a Anne, a quien no parecía importarle nada más que comer, e hizo la pregunta en su lugar.
—A la mañana siguiente.
Luego le pediré a Randolf que compre dos boletos para el buque.
Si hay alguna información del oficial administrativo, solo dile directamente que no estoy aquí.
Que la diga cuando vuelva.
Este par de días Rhode informó el asunto de Risco Alto a Klautz.
Pero lo que Klautz fuera a hacer o quisiera hacer, no era su problema.
Como la misión había sido completada, incluso si la gente de Risco Alto pedía ayuda, eso era problema suyo, aunque lo más seguro era que no se atreverían a quejarse.
—Entiendo —asintió Marlene al escuchar la respuesta de Rhode.
En este momento él de repente vio a Christie, que sostenía el jarrón de agua mientras lo miraba incómoda.
Había un dejo de apego y poca disposición en sus ojos.
—¿Rhode…
te vas?
—Solo me voy por un tiempo a hacer algo —dijo Rhode ante la inquietud de Christie, mostrando una cálida sonrisa para tranquilizarle—.
No te preocupes, volveré enunos días.
—Está bien…
Al escuchar su respuesta, Christie asintió y no dijo más nada.
En realidad se sentía muy complicada.
En Risco Alto nunca había encontrado nada bueno.
Estaba acostumbrada a ese tipo de vida y ni siquiera pensaba en eso.
Si no había expectativas, no habría decepción.
Como nunca había esperado que los aldeanos la trataran bien, no les guardaría rencor porque la golpearan.
Pasaba lo mismo con el jefe del pueblo; aunque la crio y apoyó durante sus tiempos más difíciles, el anciano nunca se había preocupado por ella y siempre la trató como si fuera aire.
Incluso ella misma aceptó este estilo de vida, aunque según otras personas, esta era una vida llena de sufrimiento.
Pero para Christie, que estaba acostumbrada a ella, esto no era nada.
Era como una persona que había nacido en un frío helado y rodeada de nieve.
Si la gente oriunda de un lugar cálido iba para allá, definitivamente se moriría del frío, pero los que nacieron allí ya estaban acostumbrados.
Aparte de ser un poco fastidioso, no era un gran problema.
Pero ahora se sentía un poco adolorida.
En efecto, todos aquí la trataban bien.
Pero mientras más agradables eran, más miedo tenía.
Desde que nació nunca había sentido una calidez así.
Conocía el frío y el sufrimiento más que cualquier en el grupo mercenario Starlight.
Christie sabía lo cruel que una persona podía ser, y también sabía qué le ocurriría si esa gente llegara a odiarla.
Esto la preocupó y le dio miedo.
Justo ahora, Lize, Anne y Marlene eran muy amables con ella, pero nunca había sentido un calor así.
Mientras más amables eran, más miedo le daba.
Temía que pudieran dejarla algún día.
No sería capaz de aceptar ese golpe.
Puede que a otras personas no les importen este tipo de cosas, pero para Christie era fundamental.
Muchos nacían en ambientes cálidos, bajo la protección de sus padres y con un círculo de amigos.
Claro, ellos experimentaban varios problemas en el futuro, pero como tenían el privilegio de sentir un calor así, nacían con buena voluntad.
Era diferente para Christie, que había sido odiada, maldecida y despreciada desde el momento en que nació, además de abusada y golpeada.
Si fuera otra persona, tal vez habría perdido las esperanzas con respecto a este mundo lleno de odio, pero Christie podía mantener su corazón puro.
Era algo muy raro…
Por eso, cada vez que Lize y los otros eran buenos con ella, tenía que responderles y no podía evitar preocuparse.
Su instinto de defensa propia hacía que dudara de las manos amistosas que la gente le extendía.
Temía que pudiera sufrir si tomaba esa mano.
De ser ese el caso, sería mejor que se alejara desde un comienzo para que no le doliera tanto…
Solo frente a Rhode, Christie no pensaba así.
Siempre que lo veía, sentía que las preocupaciones y los problemas en su corazón desaparecían.
No sabía por qué, pero no era cautelosa con esta persona que había nacido con la misma apariencia que ella.
Era como si quedarse a su lado fuera muy cómodo, y no pensaba en nada raro cuando estaba con él.
Se sentía muy a gusto.
Por eso Christie no quería que Rhode se fuera.
Pero gracias a lo que le había ocurrido, era más madura que muchos de sus pares, así que sabía que no podía ser egoísta esta vez.
Asintió con la cabeza y no dijo nada, pero su expresión triste mostró sus sentimientos.
Rhode pudo ver su cara y sintió un dilema, pero no dijo nada.
La emoción y el intelecto eran dos cosas distintas.
En el futuro tal vez tendría que salir por más tiempo que ahora, así que Christie no podía quedarse a su lado para siempre.
Su condición física tampoco le permitía viajar muy lejos…
Aunque sintió lástima por ella, no tenía una mejor alternativa y solo podía hacer esto.
A la mañana siguiente, Rhode y Anne fueron al puerto ubicado en Piedra Profunda.
A simple vista no parecía diferente de cualquier otro puerto.
Había un buque atracado allí, con largas cuerdas amarradas a él y a unos pilares para mantener su equilibrio.
Una plancha conectaba el buque con el muelle mientras que unos trabajadores movían los bienes, como minerales, a la nave.
Sostenían el cargamento o empujaban la carreta hacia el buque.
Los carruajes estaban estacionados en el otro lado y esperaban los vegetales, frutas y otros bienes que salían del barco.
Se veía exactamente igual que los bulliciosos puertos comerciales de otras ciudades, si se ignoraba el hecho de que estaba construido en la ladera.
En el juego, a Rhode le maravilló alguna vez esta magnífica escena, pero no pensó que fuera extraña porque, sin importar lo real que fuera, seguía siendo solo información.
¿Qué era raro de enviar cosas volando por el cielo o flotando en el mar?
Pero en la realidad, cuando vio el puerto lleno de gente y los buques flotantes ir y venir por los aires, sintió que era realmente increíble.
Solo ver el buque que flotaba en el aire, sin ninguna máquina o electricidad que lo mantuviera allí.
Solo había una cuerda amarrada a él.
Realmente era muy poco confiable; ¿y si la nave se caía?
Observó las naves flotantes cercanas y sacudió la cabeza.
Después se cubrió con su capa para esconder su identidad.
No quería atraer ninguna atención no deseada en este viaje, así que decidió ser de bajo perfil.
Sabía cuántos problemas podría traerle su rostro.
Desde joven, el maestro y sus pares siempre lo habían tratado como una chica.
Cuando llegó al mundo del juego, finalmente fue mucho más agradable.
Escogió un personaje masculino robusto para no tener que preocuparse de que lo trataran como una niña.
Esta era una de las razones por las que le gustaba tanto Dragon Soul Continent.
Al menos, en el juego, nadie lo confundiría con una chica…
Al final, había vuelto al punto inicial.
Era muy trágico…
—¡Ah, líder!¡Anne encontró nuestro buque!
Anne cargaba su escudo de oro fino y saltaba en torno a Rhode.
Estiró la mano y apuntó a un barco que no estaba muy lejos.
Rhode miró en esa dirección y vio unbuque de dos pisos flotando en el puerto, su bandera bordada con un dibujo de un ala dorada.
Cuando vio este estampado, bajó la cabeza y vio el mismo diseño en su boleto.
Era este.
Fuente: Webnovel.com, actualizado en Leernovelas.com