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519: 519 Quedan cuatro 519: 519 Quedan cuatro Editor: Nyoi-Bo Studio —¡Shen Ying!

—exclamó Lonemoon, fulminándola con la mirada—.

Más te vale que no te venga la bondad repentina ahora.

—Um… solo quería indicar que, se te olvida una —Shen Ying le dio un mordisco a su fruta, para luego señalar a Zhi Lin a un costado.

La cara de Zhi Lin palideció al instante, mirándolos a todos con incredulidad.

—Hermana Shen… Comenzaron a brotar lágrimas de sus ojos, viéndose muy dolida, podría estallar en llanto en cualquier momento.

—De verdad… —al decir esto, Shen Ying ladeó su cabeza, todavía mostrando una actitud lánguida, con sus ojos entrecerrados—.

Me gustan mucho las flores de loto blancas; es solo que no me gustan aquellas con corazón negro.

Las cejas de Lonemoon se juntaron.

—¡Gordito, échala junto a los demás!

—Sí, Maestro.

Gordito solo pudo devolverse para arrastrarla.

—¡No!

No quiero dejar la montaña —afirmó Zhi Lin, quien entró en completo pánico esta vez, las lágrimas caían mientras rogaba—.

Maestro… Hermano, hermano, ayúdame —frenéticamente agarró a Jian Xing, que estaba al lado de ella.

Jian Xing también se veía muy preocupado cuando se arrodilló e imploró: —Maestro, la Pequeña Lin no hizo nada malo, ¿Por qué la expulsa también?

Después de todo, era su hermana.

Lonemoon iba a responder cuando Shen Ying de repente se adelantó.

Sacó una botella de aspecto familiar, y se la dio a Zhi Lin.

—¡Recogí esto, te lo devuelvo!

Era una botella de píldoras de liberación de grano, que resultó ser la misma botella que Zi Yu le había dado a Shen Ying aquella vez.

La cara de Zhi Lin se puso pálida como un fantasma inmediatamente, incluso la mano que sostenía a Jian Xing se relajó y se cayó al contemplar aquella botella con incredulidad.

Ella… lo sabía todo.

Gordito también se desconcertó al ver esa botella, en verdad fue ella la que había instruido a Zi Yu para que se acercara e hiciera que Shen Ying se abstuviera de comer, al pensarlo un poco más, Zi Yu no era una cultivadora de núcleo, Zhi Lin lo era.

Su cara se oscureció al instante cuando de un golpe la despojó de su cultivación y la echó.

—¡Ah, Sí!

—cuando Gordito estaba a punto de salir con las cinco personas a rastras, Lonemoon de repente añadió—: Parece que sigo olvidando algo que debería decirles todos ustedes, Shen Ying… es nuestra verdadera Maestra de Secta.

Esta vez, no sólo los cinco discípulos expulsado, sino que también los cuatro restantes habían quedado boquiabiertos, mirando a Shen Ying sin poder creerlo ¡Ella… era la maestra de secta!

—¿Acaso Padre Niu le estaba devolviendo convenientemente toda la responsabilidad?

—reflexionó Shen Ying.

¡Hijo de p*rra!

—Maestro… —dijo Jian Xing mirando de nuevo a Lonemoon con algo de angustia.

—Sé lo que quieres decir —agregó Lonemoon, quien lo detuvo de expresar las palabras que ya estaban en su boca y se volteó a mirar a sus tres discípulos restantes a un costado antes de decirles con una voz baja—.

Les enseño a todos ustedes la práctica de la cultivación porque realmente espero que consigan algo en el futuro y pasen las técnicas de cultivación a más personas, para así proteger a las personas mortales y disminuir el sufrimiento en el mundo.

¡Pero espero que todos ustedes recuerden, que yo los elegí porque resultaron aparecer aquí, y no porque sean irremplazables!

Todos se sobresaltaron y sus expresiones cambiaron al inclinar sus cabezas, incluso Jian Xing había ahuecado sus puños.

Lonemoon echó un vistazo al grupo que se estaba a punto de ser llevado al pie de la montaña, con sus ojos semicerrados, comentó: —Todos ustedes se deberían alegrar de que el Ch… Yi Qing no está aquí hoy.

Si estuviera, no solo ese grupo, sino que todos ustedes no hubieran podido ni soñar con dejar esta montaña vivos.

—… Atreviéndose a provocar al tramposo, ¿Qué se creen que son Shen Jing?

————— Era otro día de riego.

—Shen Ying, ¿De verdad está bien no regar las plantas hoy?

—Champiñón echó un vistazo a las filas de hongos caídos a un lado del meridiano inmortal y preguntó con algo de preocupación.

—No comí, no tengo energía para regar —Shen Ying se dejó caer en la roca como barro, mordisqueando una fruta—.

Tampoco sé cuándo el Chef va a volver.

Padre Niu dijo que el Chef había ido a echarle una mano al Conejo en la supervisión del segundo grupo de estudiantes de la rama del Palacio de la Noche Púrpura en la Academia Civil y Militar.

Que pasaría un tiempo allí y solo volvería después de que el Conejo le haya lavado el cerebro al grupo completo.

—¿Eh?

¿Pero no tiene al Gran Inmortal Lonemoon para hacerle comida?

La esquina de los labios de Shen Ying se movió a un lado al mirar a Champiñón con una expresión que no se podía expresar con palabras —¡Ahh, no lo entiendes!

—pensó que si le dieran esa porquería en cada comida, prefería comer bocadillos todos los días—.

¿Quieres una fruta?

—le entregó una.

Los ojos de Champiñón se encendieron y asintió fervorosamente antes de recibirla.

—Shen Ying es la mejor, la mejor persona en el mundo entero —Champiñón la catalogó como una persona buena con una mirada inocente—.

Es la única persona que me da comida además de Florecilla.

—¿Y Gordito no?

—Shen Ying no pudo evitar preguntar—: ¿Ustedes dos no andan juntos a menudo?

Champiñón sacudió la cabeza y puso mala cara, algo enojado: —Sólo me da zanahorias y hasta me dijo que me abstuviera de comer.

—… —Ahh, como esperaba, ¡El Conejo era el verdadero amor de Gordito!

—Todavía es la mejor —Champiñón la miró con ojos brillantes—.

Pero… ¿por qué es que todas las frutas que me ha dado estos días tienen una mordida?

—Um… —al decir esto, Shen Ying se quedó inmóvil un momento—.

No te preocupes por esos detalles.

—Bien —Champiñón simplemente dejó de preguntar y añadió después de pensar un momento—: Hui Ze ha estado deprimido recientemente, ya ni siquiera planta hongos conmigo, me aburro mucho, estoy absolutamente solo.

—¿Qué le pasa?

—Shen Ying siguió la conversación.

—Dijo que no sabe cómo enseñarles a sus discípulos y se preocupa por lo que hará en el futuro.

—Ah … —Ha estado tan tranquilo estos últimos días, desaparecieron varias personas.

La pequeña hermana que recogió hierbas la otra vez se fue también —dijo Champiñón mientras masticaba la fruta.

—¿Te gusta mucho ella?

—Shen Ying miró hacia atrás.

—Mm… —pensó un rato antes de asentir—.

Era la única que se dirigiría a mí entre el grupo entero, creo que sí —dijo frunciendo el ceño, un poco confundido—.

Pero Hui Ze me dijo que me alejara de ella, no sé por qué.

Si ya se fue, ¿cómo me alejo?

—Ah —Shen Ying siguió mordisqueando su fruta.

—¡A propósito, Shen Ying!

—Champiñón sostuvo su mano y señaló hacia el gran árbol en el frente, diciendo—: ¿Le debe a esa persona muchas frutas?

—¿Hmm?

—se preguntó Shen Ying mirando a una persona de pie bajo el árbol, le parecía ligeramente familiar.

Le recordaba al discípulo de la Encarnación de la Espada Innata del que Padre Niu hablaba todo el día y se jactaba delante del Chef hace un tiempo.

Había olvidado su nombre.

—¿Soy la clase de persona que tendría una deuda?

Un padre pagará la deuda de su hija.

Aun si la tuviera, sería cosa del Padre Niu.

—Pero nos ha estado mirando desde ese punto por cuatro horas.

—Si ese es el caso —al decir esto, los ojos de Shen Ying se estrecharon—.

Entonces lo miraremos de vuelta.

No podía perder.

—¡Sí!

—asintió Champiñón con fervor.

Entonces, dos miradas aterrizaron en la figura bajo el árbol, sin dejar de mordisquear sus frutas mientras miraban fijamente.

De repente, la montaña trasera se llenó de sonidos de morder y masticar.

Jian Xing se heló por un momento y desvió su mirada muy avergonzado en menos de 10 segundos.

Al instante sintió que tales acciones de su parte eran no eran solo tontas, sino que también de alguna manera sentía que había sido derrotado.

Tosió y retrajo su mirada fija con un ceño fruncido antes de acercarse y pararse frente a las dos personas con una cara inexpresiva.

Ahuecando sus puños, se dobló hacia Shen Ying respetuosamente.

—¡Saludos, Maestra de Secta!

—al decir esto, su mirada pareció posarse en Champiñón.

—Mm —Shen Ying respondió con pereza.

El muchacho apretó las manos a sus costados, inhaló profundamente y dijo: —Jian Xing viene esta vez para pedirle perdón a la Maestra de Secta de parte de mi hermana.

Espero que la Maestro de Secta perdone su comportamiento grosero y ofensivo anterior, considerando que ella es joven.

Fuente: Webnovel.com, actualizado en Leernovelas.com

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